Visita de una librería.

En primer lugar, me dirigí a la librería "Pepa Luna". En general decir, que se encuentra en Chamartín, en la calle Potosí, 7; está muy bien comunicado ya que se encuentra cerca del metro Colombia.

Para ponernos en situación, Pepa Luna es un espacio para niños pero también un punto de encuentro y juego para los padres y los más pequeños de la casa de hasta 10-11 años. En este "planeta" lleno de "marcianos", como se autodenominan, se encuentra una exquisita selección de libros infantiles, pero además disfraces (versiones de trajes clásicos y algunos traídos directamente de París), juguetes y otros objetos para niños, algunos hechos a mano y otros más innovadores.

Su objetivo es fomentar la cultura entre los más pequeños y, para ello, ha diseñado una original programación de juegos didácticos y talleres para disfrutar aprendiendo. Su "laboratorio" es un espacio de encuentro entre padres e hijos donde se leen libros, se hacen trabajos plásticos, se descubre la belleza de la música y se presentan actos relacionados con el público infantil. Entre los talleres que han presentado destacan los relacionados con el universo del arte y los cuentos.

Para comentar mí paso por esta librería, tengo que decir que en primer lugar me impactó mucho la entrada, está muy bien decorada y te advierte de que vas a entrar en un mundo de fantasía por su claridad, decoración… Me parece algo muy importante, el niño se guía mucho por el colorido, las formas... y por eso, si ese primer encuentro es positivo, el niño estará más motivado.  

Al entrar, me quedé impresionada con la habilidad que tenía ese lugar para acogerte. La librería se encuentra al final y ocupa un gran espacio; quedé maravillada con la organización y su importancia, con la cantidad de libros que había sin entender muy bien en qué se habían basado para su organización. Al lado había sillones para que los niños pudieran disfrutar de la lectura (pedí fotografiar está zona pero no me lo permitieron porque había niños), mesas con sillas para que los niños puedan probar los juguetes, pizarras para que los más pequeños puedan expresar su lectura mediante dibujos... Este rincón posee una luz clara, que en mi opinión no es la más adecuada para la lectura.

Observé con detalle para poder darle un motivo lógico a la colocación, y con ayuda de la dependienta y mi deducción, le conseguimos dar un significado a todo.

Como se ve en la imagen, aunque no se ve en una totalidad, los libros están distribuidos por edades, editoriales y temas. Las baldas de abajo están destinadas a niños de 1 a 2,5 años. Las hojas de los libros son de pasta dura, muy cortos y de temas sencillos, con imágenes sencillas para que capten entornos cortos relacionados con el entorno.

La siguiente balda, está destinada a niños de hasta 4-5 años, la mayoría son cuentos y fábulas con personificaciones y objetos animados, cuentan con poca letra y con ilustraciones. El niño va desarrollando la capacidad para comprender historias. Otra balda más arriba, está destinada a niños de hasta 7 años, en estos libros se quiere trabajar la lectura de la imagen, descubrir los colores, localizar los objetos, e ir descubriendo las conexiones entre los dibujos, y entre éstos y el texto que los acompaña. Además en esta misma balda, tienen pop ups, para que los niños no alcancen y puedan romperlos. Después, los destinados a niños de hasta 10-11 años, son novelas con mayor dificultad. Al principio, al niño le gustan todavía cuentos e historias fantásticas (hadas, brujas, magos...) que le aportan imaginación al niño; para ir adentrándose en novelas de aventura... Y por último, en la última balda tiene libros para niños de nueve a 11 años, con libros de aún más dificultad; a estas edades, predomina la razón sobre la fantasía en el niño.

Además, tienen un espacio dedicado, para libros "raros" como ellos mismos denominan; donde tratan temas como la homosexualidad, el alzhéimer, la muerte...; los tienen separados para tenerlos ubicados y que alguien no se los lleve por error. También, en ese mismo espacio tienen libros de inglés y pop ups diferentes, como por ejemplo, uno de ellos que me gustó personalmente, consistía en encontrar a los largo del libro, el número 2 entre numerosas figuras, árboles... en 3D; estos últimos libros son para niños que ya tengan bastante madurez intelectual. Además de libros de manualidades, arte, pintura...

En una estantería aparte, había libros grandes, con muchas ilustraciones y poca letra, para contarlos. En estos libros, la letra es un apoyo para el adulto, y las numerosas ilustraciones adentran al niño en la historia.

Algo que me pareció muy curioso, es que los dependientes han leído todos los libros que tienen para poder contarlos a quien viene buscando una historia para contar o regalar.

Cómo he comentado anteriormente, tienen un taller que se encuentra en una planta más abajo, en una sala independiente a la tienda y en él se pretende estimular la creatividad y acercar a los pequeños al mundo del arte a través del juego, que sea un lugar donde puedan inventar, diseñar, pintar, crear... Aquí se realizan talleres de arte para niños, presentación de libros y exposiciones de ilustración; un lugar para inventar historias y vivir fantásticas aventuras donde los niños son los protagonistas.

Tienen clases de teatro, de creatividad, de bebés, sábados de cuento (donde durante algo más de una hora, los niños pueden escuchar, vivir, escenificar y pasar un rato mágico con un cuento diferente), cumpleaños, celebraciones, actividades en vacaciones del cole y talleres diferentes para niños, actividades en familia...

Además, organizan encuentros con autores totalmente gratuitos. Cuando fui a la librería, esa misma semana dedicaban una tarde a un nuevo libro de la editorial OQO, "Lo que tiene que aprender un ciempiés que quiere ser sabio como Pedrito" y su autora, Mercedes Carrión, se lo contará. No hay muchas ocasiones en las que los niños pueden tener contacto directo con el autor o el ilustrador de un cuento, conocer a la persona que ha escrito el cuento que tiene en sus manos,  hablar con él/ella e incluso que se lo firme. 

En mi opinión, es un sitio maravilloso, tiene todo lo necesario para que los niños queden enganchados a los cuentos y a su lectura. Sin duda es un sitio que recomendaré.